La tristeza es un compañero vital importante, puede ayudarnos a parar del frenesí diario y permitirnos ver desde otro prisma las cosas, de forma más pausada.
También nos permite asimilar una circunstancia que causa dolor (como la pérdida de un ser querido, la situación prolongada de desempleo, la sensación de desilusión, etc.)
Cuando el desánimo permanece en el tiempo y de forma intensa, entonces puede ser un compañero que dificulta más de lo que ayuda.
La tristeza nos empuja a percibir las cosas de forma más pausada y nos permite asimilar una circunstancia dolorosa. Aunque, a veces permanece de forma reiterada, interfiriendo en nuestra vida.
Para saber cómo le afecta el bajo estado de ánimo, puede plantearse algunas cuestiones:
- ¿Cuánto tiempo llevo triste, deprimido o desanimado?
- En los últimos meses ¿Son más los momentos de alegria o los de tristeza?
- ¿He dejado de emprender proyectos, de realizar actividades o aficiones que antes me interesaban?
- ¿Tengo ganas de ver a otras personas o prefiero estar solo?
- ¿Suelo enfrentarme a las cosas o renuncio a hacerlo?
Las respuestas a esas preguntas pueden orientarle para averiguar si el estado de ánimo que presenta le resulta un lastre o no.
"8 cosas que no debes hacer cuando alguien está deprimido"
Publicado el 17 de Marzo de 2015 en SModa - El País
Aportamos algunas ideas a tener en cuenta cuando tenemos un familiar con el problema psicológico de la depresión.